Buscar este blog

domingo, 3 de enero de 2016

Que la paz sea en todas las moradas

Hola a tod@s,

Ayer hemos estudiado la tercera y última parte del Capítulo 25 - Buscad y Hallaréis de El Evangelio Según el Espiritismo con el tema "No os pongáis en trabajos para tener oro".
Después de la lectura en grupos, nuestros monitores nos han propuesta contestar a cuatro preguntas sobre el texto expuesto.
A ver cuales fueran nuestras respuestas y reflexiones sobre el estudio en grupo.

1. ¿Por qué nos es tan difícil creer en la Providencia Divina?
Debido a nuestro estado evolutivo moral actual tendemos a creer más a las ideas materiales, de las ayudas que podemos ver y tener exactamente en el momento presente, nos olvidamos que todas las consecuencias de hoy pueden ser resultados de acciones del pasado y la falta fe de en el porvenir nos aleja aún más de Dios y de las leyes perfectas para nuestra evolución.

2. Cuáles son las acciones diarias para que la Providencia Divina nos ampare?
Deben ser acciones llenas de buena voluntad para nuestro propio adelantamiento y con respeto a todos los demás seres que aquí habitan.
Cuando nos conectamos con la Sabiduría Suprema a través de las buenas acciones del día a día, orando y vigilando lo que hacemos para los demás a igual que nos gustaría saber para nosotros mismos estaremos siempre amparados.
También podemos seguir las orientaciones de San Agustín cuando nos invita a la reflexión diaria de todas nuestras buenas y equivocadas acciones. Puede que no tengamos lo que deseamos pero recibiremos todo lo que necesitamos para nuestra evolución, y cuando sean pruebas difíciles nos auxiliará y fortalecerá para afrontarlas.



3. Según Jesús, ¿quiénes son las personas dignas de dar hospedaje?
Primeramente aclaramos que es "hospedaje".
Sabemos que Jesús usaba las costumbres y las palabras para ilustrar enseñanzas muy profundas de sentimientos y acciones morales como guía para nuestra evolución. Debemos siempre reflexionar profundamente sus palabras más allá de las historias y nada al pie de la letra.
Podemos entender como hospedaje el propio cuerpo físico que tenemos, donde alberga a nuestro espíritu, a esa inteligencia inmortal, que necesita aprender, que necesita de paz interior, de practicar la caridad interior, el auto-perdón y el auto-amor.
Debemos estar abiertos para escuchar y aceptar las palabras de amor que nos dejó. También debemos abrir las puertas a aquellos que quieren escucharlas, hablando de sus consuelos y esperanzas a todos los que lo buscan.
Así que, para Jesús, todos somos dignos de dar hospedaje a sus palabras.

4. ¿Y cuáles son las actitudes que debemos tener con aquellos que no son dignos de dar hospedaje?
Si partimos del principio que TODOS son dignos de hospedaje solamente tenemos que cuidar de no "violentar ninguna conciencia" si ella no busca las enseñanzas, respetando su decisión, su libre albedrío, sus creencias, esperando el momento de dar el cobijo necesario a cada uno.
Debemos entender que divulgar la Doctrina Espírita es respetar el momento del otro, que no tenemos ninguna necesidad de convencer a nadie de nuestra verdad, de lo contrario podría parecer que nosotros mismos necesitamos convencernos de ella.


Que podemos seguir los pasos de los viajeros de bien, que llevan la paz a todos los rincones de manera responsable y digna de la segura hospedaje del amor del Padre.

¡Buena semana y nos vemos el prójimo sábado!

Divulgación CEADS

No hay comentarios:

Publicar un comentario