¡Muy buenas noches!
Este Sábado, en CEADS, tenemos el ESDE con el tema "Los Atributos de la Divinidad", a las 17.30 horas. Estáis todos invitados al estudio y convivencia espírita.
Os dejamos el texto para la lectura sobre el tema que trataremos.
Un saludo fraterno. CEADS
Atributos de la Divinidad
El hombre solo puede
formarse una muy imperfecta idea acerca de los atributos de la
Divinidad. Atributos
son cualidades que caracterizan al ser y están evidentemente, en relación con
su naturaleza íntima. Por lo tanto, para que tuviéramos una idea completa de
los atributos
divinos, deberíamos
conocer integralmente su esencia. El hombre puede comprender a Dios a través de
la razón, así como del sentimiento innato que le da la intuición de su existencia;
pero no puede percibirlo de la manera como se perciben las cosas materiales.
Interrogados por Allan
Kardec respecto a la posibilidad de que el hombre comprendiera la naturaleza
íntima de Dios, los Espíritus respondieron categóricamente: “No, éste es uno de los sentidos le falta
aún al ser humano”.
Al no poder abarcar el
hombre por su carencia perceptiva todos los atributos divinos de la absoluta
perfección, puede, sin embargo, formarse una idea de algunos, exactamente aquellos
de los que no pueden faltar a Dios. En esos atributos, que vamos seguidamente a
enumerar, Él tiene que ser perfecto, poseer en grado supremo todas las
perfecciones y ser en todas infinito.
La razón en efecto, nos
dice que Dios debe poseer en grado supremo esas perfecciones, ya que si alguna
le faltase o no fuese infinita, el no sería superior a todo, no sería por consiguiente,
Dios.
Dios es Espíritu - el
supremo Espíritu. Absolutamente perfecto, no es comparable con ningún otro ser,
por estar infinitamente por encima de todos; al poseer sabiduría y poder infinitos,
está velando, omnipresente, a todo el Universo, y a todo comunica, omnipotente,
su influjo y su voluntad.
1 - Dios es eterno, es decir, no tiene
comienzo ni tendrá fin. Si hubiera tenido principio habría salido de la nada,
pero como la nada no existe, no puede producir cosa alguna. Si hubiera sido
creado por otro ser anterior, éste sería Dios. Si supusiéramos que tuvo un
comienzo o que tendrá un final, podríamos concebir una entidad que existiera
antes que él y capaz de sobrevivirlo.
2 - Dios es inmutable, si no fuese así, el
Universo no tendría estabilidad, porque las leyes que lo rigen estarían sujetas
a variaciones. Sin embargo, lo que se verifica es lo contrario: por todas
partes y en todo existe la estabilidad y la armonía.
3 - Dios es inmaterial. Su naturaleza
difiere de todo lo que conocemos como materia. Por eso es absolutamente
invisible, intangible, en fin, inaccesible a cualquier percepción sensorial. De
otro modo, Él no sería inmutable, porque estaría sujeto a las transformaciones
de la materia.
4 - Dios es Único. La unicidad de Dios es consecuencia
del hecho de que sus perfecciones son infinitas. No hay Dioses, sino solamente un
Dios, soberano del Universo, creador absoluto e increado infinito y eterno. Si hubiese
muchos dioses no habría unidad de miras, ni unidad de poder en el ordenamiento
del Universo.
5 - Dios es Omnipotente. Su voluntad es
Soberana y prevalecen siempre sus designios sabios y justos. Él lo es porque es
único. Si no dispusiera del soberano poder, habría algo más poderoso o tan
poderoso como Él.
6 - Dios es soberanamente justo y bueno. En
todo y en todas partes aparecen la bondad y la justicia de Dios, en la
providencia con la que a través de leyes perfectas asiste a sus criaturas. La
sabiduría providencial de las leyes divinas se revela así en las cosas más pequeñas
como en las más grandes y esa sabiduría no nos permite tener dudas ni de la justicia
ni de la bondad de Dios.
La soberana bondad
implica soberana justicia, porque si procediera injustamente o con parcialidad aunque
sólo fuera en una circunstancia o en relación con una sola de sus criaturas, ya
no sería soberanamente justo y, en consecuencia, no sería soberanamente bueno.
7- Dios es infinitamente perfecto. Es imposible concebir a Dios sin
perfecciones infinitas, pues sin ellas no sería Dios. Para que ningún otro ser
pueda superarlo es necesario que sea infinito en todo.
Si los atributos de
Dios son infinitos, no pueden sufrir incremento ni disminución, porque de lo
contrario no serían infinitos y Dios no sería perfecto. Si se le quitara la más
mínima insignificancia a alguno de sus atributos, ya no habría Dios, porque
podría existir otro ser más perfecto.
Dios
es, por lo tanto, la inteligencia suprema y soberana; único, eterno, inmutable,
inmaterial, omnipotente, soberanamente justo y bueno, infinito en todas las
perfecciones y no puede ser de otra manera
Dios es Espíritu,
repitámoslo. Lo afirmó Jesús en su coloquio con la Samaritana, cuando agregó
también que es en Espíritu y verdad que deben adorarlo los hombres. Su esencia
íntima no puede percibirla el hombre porque le falta el sentido para eso,
conforme con la respuesta de los Espíritus a la argumentación de Kardec.
No obstante, el
codificador, evidenciando una elevada inspiración que vibraba en él y una lúcida
esperanza, volvió a preguntar:
¿Será dado al hombre
comprender algún día el misterio de la Divinidad?
A lo que los Espíritus,
solícitos, respondieron:
«Cuando ya no tenga el Espíritu oscurecido por la materia.
Cuando por su perfección se haya aproximado a Dios, lo verá y lo comprenderá »
De tal manera, en la
propia idea de Dios como esencia puramente espiritual y en la posibilidad de
llegar a verlo un día y a comprenderlo - cuando haya llegado a ser Espíritu puro
y perfecto – está delineada para el hombre toda una perspectiva de trabajo y de
esperanza: de peldaño en peldaño progresará y al evolucionar espiritualmente
adquirirá nuevos y más perfectos sentidos, hasta conquistar un sentido
puramente espiritual que le permitirá ponerse en relación con Dios, viéndolo,
oyéndolo, y comprendiendo, su Divina Voluntad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario