Otro sábado de aprendizaje en el que hemos estado reunidos en nuestro querido Centro Espírita Amalia Domingo Soler para aprender de las enseñanzas de los espíritus.
Leímos en clase un resumen del capítulo 8 del libro Los Mensajeros, dictado por André Luiz y escrito por Chico Xavier. En misión educativa, André Luiz nos relata historias de espíritus que conoció en la ciudad espiritual Nuestro Hogar. En esta ciudad espiritual, tuvo la oportunidad de conocer los trabajos del Ministerio de Comunicaciones, donde los espíritus que tendrán en sus planes reencarnatorios la misión de la mediumnidad se preparan con estudios e instrucciones sobre el tema. En el capítulo 8, André Luiz nos cuenta el caso de Acelino, un médium que, pese a haberse preparado en el plan espiritual y tener todo el apoyo para el desarrollo de sus actividades mediumnicas, una vez encarnado, decide cobrar por sus servicios espirituales, pierde el respaldo de la espiritualidad superior y, en el momento de su desencarnación, sufre las consecuenciasde la sintonía establecida con espíritus de intereses poco elevados.
Nos pusimos en parejas para examinar el caso y contestar a 3 preguntas:
- Acelino decide cobrar por sus servicios espirituales porque considera que este es un trabajo como otro cualquiera, piensa que si los curas y sacerdotes cobran él también lo pude hacer y, además, recibe el apoyo de miembros de su grupo mediúmnico. ¿Son correctos los argumentos de Acelino?
Todos hemos coincidido en que no, los argumentos del médium no son correctos. De hecho, es el mismo Acelino que, en el capítulo 8, nos explica como de equivocado estaba cuando encarnado. En una perspectiva espiritista de la mediumnidad, esta se entiende como caridad y debe ser realizada por amor a Dios y al prójimo. Además, la mediumnidad es una facultad que viene dada desde el plan espiritual, en un gran número de casos como prueba reencarnatoria. El médium es únicamente un canal, que puede sintonizar con espíritus de intereses elevados o rastreros, según su proceder. Como canal, el médium no tiene merito por los trabajos espirituales realizados por la espiritualidad con su concurso, pese a que es responsable en todo momento por inhibir y limitar la expresión física y verbal de los espíritus que se comuniquen a través de su cuerpo físico. El médium debe examinar su propia conciencia en lugar de justificar sus errores mirando lo que dicen o hacen los demás. Jesús nos enseñó a dar de gracia lo que de gracia recibimos. La mediumnidad es una facultad, un encargo recibido en el plan espiritual, que debe ser ejercida con independencia de intereses, vanidades u otros sentimientos inferiores. Precisamente por esto, es una prueba para el que cargue con ella: puesto que somos todos seres imperfectos, recibir un encargo que exige un proceder “santo” es una responsabilidad que pocos estamos preparados para albergar. La responsabilidad de los que no somos médiums pero convivimos con ellos tampoco es pequeña: hay que amparar nuestros hermanos en la búsqueda de los valores superiores, procurar no alimentarles la vanidad y, sobretodo, no procurarles con preguntas menos elevadas, individualismos, etc., que pueden establecer una relación de dependencia entre el médium y el que le solicita ayuda.
- ¿Con base en la información que disponemos de la vida de Acelino, en qué situación se puede prever que desencarna el medium?
Al decidir alejarse de los ideales propuestos para el ejercicio de la mediumnidad, Acelino estable lazos más fuertes con la espiritualidad inferior. Él mismo nos relata su dolorosa situación:
"Desde el instante de la gran transición, la ronda obscura de los consultantes criminosos, que me habían precedido en la tumba, me rodeó reclamando pronósticos y orientaciones de naturaleza inferior. Querían noticias de sus cómplices encarnados, de resultados comerciales, de soluciones atinentes a relaciones clandestinas. Grité, lloré, imploré, pero estaba encadenado a ellos por siniestros hilos mentales, en virtud de la imprevisión en la defensa de mi propio patrimonio espiritual. Durante once años consecutivos, expié las faltas, en medio de ellos, entre el remordimiento y la amargura."
- ¿De qué ayuda disponía Acelido desde el plan espiritual para la ejecución de su tarea mediumnica?
- Apoyo de la espiritualidad superior en todo momento.
- El amparo de un equipo mediumnico serio.
- Un cuerpo físico dotado de la vitalidad, fuerza y vigor necesarios para el desarrollo de su misión.
Después de la ronda inicial de debate de las cuestiones de estudio, dos preguntas nos hicieron profundizar un poco más en el tema.
La primera, hizo referencia al juicio que estábamos haciendo del caso de Acelino – pese a que en el momento de la reunión, en nuestro gracioso portuñol, solo nos salía juzgamiento, jejeje. Si Jesús nos enseñó a no juzgar para no ser juzgados, ¿qué hacíamos criticando a Acelino? En primer lugar, hay que considerar que los relatos que nos ofrecen André Luiz y todos los espíritus que dictan libros psicografiados tienen una misión instructiva. Cuando estudiamos estos relatos, nuestra intención no es criticar Acelino ni tampoco los personajes presentados por André Luiz. Lo que debemos hacer es aprender de sus errores, para no caer en ellos. De hecho, hay que entender que pese a que hablamos de Acelino, lo que en realidad estamos haciendo es aprender, desde la perspectiva espiritista, cómo los que somos o no somos mediumns, convivimos o no con ellos, debemos proceder para seguir un camino más recto hacia nuestra propia evolución. Además, en el caso estudiando en el capítulo 8 del libro, es Acelino el primero en explicar su fracaso en la tarea mediumnica, mientras recuerda y analiza sus propias equivocaciones.
La segunda pregunta nos hizo pensar sobre la función de la espiritualidad superior y nuestro libre albedrío. ¿Será posible que, en el momento que nos equivocamos tomando decisiones que van en contra de lo que nos comprometimos en el plan espiritual, los buenos espíritus nos abandonen definitivamente? Está claro que no nos abandonarán. Estarán siempre dispuestos a socorrer los corazones arrepentidos que sinceramente soliciten ayuda, pero también respetarán en todo momento nuestra libertad de decisiones y nos dejaran vivir las consecuencias de nuestro proceder. Muchas veces, la mejor medicina para el alma que insiste en seguir por el camino equivocado es el dolor que, más tarde o más pronto, vendrá para todo aquel que se desvía del bien.
Ha quedado patente que una hora de estudio a la semana es muy poco para aprender todo lo que nos ofrece el espiritismo. Se ha sugerido que hiciéramos el debate del libro completo y está claro que para esto, hay que leerlo. Os propongo utilizar el espacio del blog para realizar este debate. Si os parece, nos damos un mes para la lectura del libro y volvemos el día 12 de julio a este debate, aquí mismo en nuestro blog.
Mientras, que el Divino Maestro nos bendiga los esfuerzos de aprendizaje y nos renueve las fuerzas para la lucha de cada día.
¡Un beso a todos y mucha luz!
http://hablandodeespiritismo.blogspot.com/
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