Hola familia,
Marcello nos pasa el texto que trabajaremos el sábado. Los más aplicados podéis ir preparando la mente y el espíritu des de ya. Nos vemos en CEADS.
Cariños,
La hermana menor
La Regla del Buen Proceder
Moral es un «conjunto de reglas que constituyen las
buenas costumbres, (...) estableciendo los principios saludables del
comportamiento humano del que resulta el respeto al prójimo y a sí mismo. Consecuencia natural de la evolución, establece los lineamientos
seguros en que se fundan las bases de la Civilización, produciendo moldes del
carácter que vitalizan las relaciones humanas, sin las cuales el hombre, por
más que haya avanzado en los esquemas técnicos, pocos pasos habría dado desde
los estados primarios del sentimiento. (...)» (7) Moral es, como dicen los Espíritus que
participaron en la Codificación Espírita, «(...) la regla del buen proceder; es
decir, de distinguir el bien y el mal. Está asentada en la observancia de la
Ley de Dios. El hombre procede bien cuando todo lo hace por el bien de todos,
porque entonces cumple la Ley de Dios». (3)
Mejor concepto que el de este enunciado es difícil de
elaborar. De una manera objetiva y simple, los Espíritus Superiores nos revelan
que la moralidad está cimentada en el progreso espiritual de las personas y es
adquirida paulatinamente, a través de las diversas experiencias
reencarnatorias; porque su cumplimiento tiene como base o fundamento el conocimiento
y práctica de la Ley de Dios, aclarando, sobre todo, que el progreso moral está
íntimamente ligado la práctica del bien.
A partir del momento en que las relaciones humanas se
expandieron, debido a la necesidad de intercambiar experiencias, el hombre
sintió el deseo de elaborar leyes que establecieran organizaciones sociales más
apropiadas al medio en que vivía. En ese período evolutivo, los seres humanos
comenzaron a hacer distinción entre el bien y el mal.» (...) Recién a partir de
Sócrates la Moral pasó a ser considerada por la filosofía (...)» (8) Hasta
entonces, la moral era ejercida arbitrariamente, de acuerdo con el equilibrio o
desequilibrio individual.
El sentido de la moralidad es uno solo; o sea, es la
norma del buen proceder en cualquier circunstancia, independientemente del
estado socio-económico del individuo; debemos cuidar de no confundir a las
conveniencias sociales, que pueden generar la disolución de las costumbres, con
la verdadera práctica de la moral. En cualquier época, el hombre que conoce y practica la
Ley de Dios es un ser moral. Es un ser que no se somete a las superficialidades
de las convenciones ni de las modas de la llamada sociedad o civilización
moderna.
A medida que vamos aprendiendo a distinguir el bien
del mal, nos vamos moralizando. Así es porque el bien consiste en obrar «(...)
conforme con la Ley de Dios; el mal es todo lo contrario. De esta forma, hacer
el bien es proceder de acuerdo con la Ley de Dios. Hacer el mal es
transgredirla». (4) Por medio de la inteligencia y al creer en Dios, el hombre
puede distinguir lo que es cierto de lo que es falso. «Dios promulgó leyes plenas de sabiduría, que tienen
por único objetivo el bien. El hombre encuentra en sí mismo todo lo que
necesita para cumplirlas. La conciencia le traza su ruta, la Ley Divina está
grabada en su corazón y, además, Dios se la recuerda constantemente por medio
de sus mesías y profetas, de todos los Espíritus encarnados que traen la misión
de esclarecer, moralizar y mejorar y, en estos últimos tiempos, por la multitud
de Espíritus liberados del envoltorio corporal que se manifiestan por todas partes.
Si el hombre se adaptase rigurosamente a las leyes divinas, no hay dudas de que
se ahorraría los males más agudos y viviría dichoso en la Tierra. Si así no
procede es por obra de su libre albedrío: sufre entonces las consecuencias de
su proceder».
Sin embargo, Dios, que es todo bondad, puso el remedio
al lado del mal; es decir, hace que del mismo mal salga el remedio. Llega un
momento en el que el exceso del mal moral se torna intolerable e impone al
hombre la necesidad de cambiar de vida. Instruido por la experiencia, se siente
impulsado a buscar en el bien, el remedio, siempre por efecto de su libre
albedrío. Cuando toma un mejor camino es por su voluntad y porque reconoció los
inconvenientes del otro. La necesidad, pues, lo obliga a mejorar moralmente,
para ser más feliz, del mismo modo que antes lo obligó a mejorar las
condiciones materiales de su existencia». (2)
La práctica del bien está, pues, relacionada con el
grado de responsabilidad del hombre; con el progreso, el mal caerá
automáticamente.» (...) El mal (...) tiene un carácter relativo y pasajero; es
la condición del alma todavía en la infancia que se ensaya para la vida. ¡Por
el simple hecho de los progresos logrados, va poco a poco disminuyendo, desaparece,
se disipa, a medida que el alma sube los escalones que conducen al poder, la virtud,
la sabiduría!
Entonces la justicia se evidencia en el Universo; deja
de haber elegidos y réprobos; todos sufren las consecuencias de sus actos, pero
todos reparan, rescatan y, tarde o temprano, se regeneran, evolucionando desde
los mundos oscuros y materiales, hacia la Luz Divina (...). en todas partes de
la realización lenta y progresiva de un ideal superior (...). Por doquier, ¡la
gran faena de los seres que trabajan para desarrollar en sí mismos, a costa de inmensos
esfuerzos, la sensibilidad, el sentimiento, la voluntad, el amor! (...) (6)
Bibliografía:
1. KARDEC, Allan. El bien y el mal. In: La Génesis. Trad. De Nora V.
Cazsadella de Girard. Buenos Aires. Editora
Argentina «18 de Abril», 1981. Ítem 03.
2. ___.Ítems 6-7.
3. ___.El Libro de los Espíritus. Trad. de Alberto Giordano. 3.ed. BuenosAires, Editora
Espírita «18 de Abril», 1983. Preg. 629.
4. ___.
Preg. 630.
5. ___.
Preg. 637.
6. DENIS,León. Justicia y responsabilidad. El problema del mal.
In:___. El Problema del Ser, del Destino y del Dolor. Trad. de Esteva Grau. 3.ed. Buenos Aires, Editora
Kier, 1976.
7. FRANCO,
Divaldo Pereira. Moral. In:___. Estudos Espíritas. Pelo Espírito Joanna de Ângelis.
2.ed. Rio de Janeiro, FEB, 1982. p.163.
8. ___.
p.164
Hablar de bien, mal, moral no va a ser facil.... ;-)
ResponderEliminarEntre todos, con humildad y entrega, lo conseguiremos, Marcello =)
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